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Todo queda en familia

Judy buscaba un lugar divertido, seguro y asequible para que sus tres hijos practicaran deporte durante el verano. Encontró los campamentos de verano Gold Crown y el resto es historia. DeMarco y Jayla (y su hermana mayor, Mariya) son nativos de Colorado que asistieron a St. Rose of Lima School y Arrupe Jesuit. Pero lo más importante, eran habituales de Gold Crown Field House, a quienes esperábamos ver cada verano tanto como ellos.

DeMarco y Jayla tienen recuerdos de nuestros campamentos de verano desde que tenían siete años. Su madre siempre les animaba a probar nuevos deportes y actividades, aunque no creyeran que fueran a gustarles. Cada verano venían a todos los campamentos deportivos que se ofrecían: Denver Nuggets Hanzlik Hoops Camp, Volleyball Camp, Golf Camp, Lacrosse Camp y Multi-Sport Camp. También participaron en nuestro día de campo anual de vacaciones a través de su escuela. Aunque les encantó probar todos los campamentos, el favorito de Jayla fue el de voleibol y el de DeMarco el de Hanzlik Hoops Camp.

Al recordar el tiempo que pasaron en el Gold Crown Field House, recuerdan las amistades que hicieron cada verano. "No sólo me relacionaba con mis compañeras de equipo, sino también con los entrenadores. Te daban la sensación de que se preocupaban de verdad por ti y siempre me ayudaban con mi forma cuando tenía problemas", reflexiona Jayla. Después de vestirse con sus compañeras de equipo con pañuelos a juego para el torneo del campamento de voleibol, nunca se pone un pañuelo sin pensar en aquel verano. A DeMarco también le encantó tener acceso a "equipos e instalaciones de gran calidad" en cada campamento. Y, por supuesto, no sería el campamento de Hanzlik sin los premios, en los que "le encantaba ponerse alguna equipación de los Nuggets o tener la oportunidad de ir a ver en directo acontecimientos deportivos profesionales como los Nuggets y los Rockies". La experiencia en general les hizo volver cada año.

Están llenos de recuerdos de sus días de campamento, pero su participación también tuvo un impacto en donde están hoy. DeMarco trabaja para 9NEWS como editor de noticias de la tarde/noche y fotoperiodista para 9 Preps. Su amor por los deportes lo ha llevado a su carrera y nueva meta que es estar "en el aire". Está deseando compartir eventos como de los que formó parte en Gold Crown, así como expresar su gratitud a las personas que hicieron posible que participara. Jayla asiste a CU Boulder y sigue muy unida a la comunidad de Gold Crown, de la que no podía alejarse. Trabaja en el Hanzlik Camp cada verano dirigiendo el Free Throw Pledge y también se la puede encontrar trabajando en las concesiones del Gold Crown Field House.

"Participar en los programas Gold Crown rompió barreras para mí", afirma DeMarco. La exposición a diversos deportes y oportunidades sentó las bases del conocimiento y el respeto y le llevó a donde está hoy. Para Jayla, su participación la sacó de su caparazón y la ayudó a hablar con gente nueva sin sentirse ansiosa. Quiere que los jóvenes de hoy sean "abiertos y no tengan miedo de salir de su zona de confort. Hay que sentirse incómodo para sentirse cómodo".

Por último, Demarco subraya la importancia de no tener miedo a fracasar. "Es mejor decir que lo intentaste que decir que decidiste no hacerlo". Desafiamos a cada uno de ustedes a seguir ese consejo, no importa en qué punto de la vida se encuentren.

Mientras ellos están agradecidos por nosotros, nosotros estamos agradecidos por ellos. Todos los niños empiezan en algún sitio, y no podríamos estar más orgullosos de que ese sitio fuera la Fundación Gold Crown para DeMarco y Jayla.

 

 

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